Video número 8 de "Cuauhtli" petecas mexicanas.

Hola, Hola!!!!!! Amigos, teníamos un poco olvidado este espacio, así que para revivir los lazos les presentamos el vídeo números 8, ojalá lo disfruten.

Comenten si les gusta y qué les gustaría ver en su espacio de vídeos. Un abrazo de año nuevo de petecas Cuauhtli.

Video número 7 de petecas cuauhtli.

Video número 7 de petecas cuauhtli.

"Cuauhtli volando en tierras chiapanecas."

Este es el resultado de la peregrinación de petecas cuauhtli por algunas zonas del país, juegos, sonrisas y mucha diversión. Fueron horas de diversión en Tapachula, la perla del Soconusco, la ciudad más grande de la frontera sur. Aquí la peteca se encontró con su hermano mexicano el pax pax.

Aqui se puede observar como los chiapanecos si que saben jugar, y saben divertirse, en gente tan alegre como la de Chiapas, nuestro juego del ave se vuelve mágico. Por favor comenten, aqui en nuestro espacio, ayudenos a ser mejor para ustedes nuestros apreciados visitantes.

Sobre la necesidad de una federación de peteca en México.

Sobre la necesidad de una federación de peteca en México.

Si acaso una de las constantes en toda la historia de la humanidad, es la necesidad que tiene el ser humano para agruparse y cumplir auxiliado por los demás los desafíos de la supervivencia. A través de este instinto el ser humano ha conquistado todos sus logros culturales, pues el dicho lo expresa claramente, "la unión hace la fuerza", y eso se manifiesta en todos los aspectos de la vida.

   Gracias a su correspondencia con Gottfried Leibniz, el famoso físico inglés Sir Isaac Newton, logró aplicar los avances teóricos matemáticos del primero en su problema particular, la fuerza de gravedad. De esta manera generó una revolución en la ciencia. La relación entre los hombres misma, ha creado la civilización todos sus aspectos materiales y espirituales. Desde el alfabeto, hasta la ciencia cibernética, todo es resultado de la colaboración entre individuos.

   En el deporte no es la excepción.  Se necesita de la suma de esfuerzos humanos para la concreción de proyectos deportivos, desde la invención de un juego hasta el desarrollo de colectivos enfocados a la creación de espacios competitivos. En el caso de la peteca, la suma de esfuerzos ha dado como resultado las federaciones nacionales de varios países y así mismo los campeonatos mundiales de la especialidad.

   De esta manera tenemos que gracias a los esfuerzos de todos los aficionados al deporte de las plumas sea generado un movimiento de orden mundial. Y gracias a quienes se interesan por primera vez logramos incendiar, lograr la reacción en cadena. Iniciar el movimiento de vuelo de las plumas de manera masiva por el cielo. Sin embargo está muy lejos de los deportes masivos como el futbol o las disciplinas olímpicas en sus modalidades de invierno y de verano.

   No es tan común que verlos jugarse o en medios masivos de comunicación mexicanos, como el resto de los deportes llamados alternativos como el frisbee o disco, la indiaca, pax pax, acrobacias en BMX o bicicleta moto cross por su acrónimo en inglés. Sin embargo en la red mundial del Internet existe un submundo dedicado a estas disciplinas. 

   Finalmente se vive actualmente en una época donde se juega mucho fùtbol y se comercializa a niveles industriales, sin restar importancia, claro, al resto de los deportes de origen anglosajón como el rugby, el baseball, o el cricket. 

   Son industrias de millones, pero más pequeñas sin duda al deporte cuya federación mundial que tiene más países tiene que la ONU. Haciendo números podemos pesar un poco la situación de manera tangible.

   Estamos en un mundo donde la costumbre de mayorías dicta las condiciones de las mayorías masivas a aquellos que no aceptan de entrada el mismo código y prefieren participar de otras diversiones. De ahí la necesidad de diversificar los deportes pensando en las personas que no quieren ver el fútbol como su única opción deportiva en la gama de actividades recreativas y deportivas.

   Pensando en esto se insinúa cómo puede ayudar una federación de peteca en México y en otros lugares donde casi no se practican éstos deportes. Así mismo organizar todo el deporte alternativo de manera en que se convierta en una opción de interés de una juventud que se llena de obesidad en su cuerpo e inunda de imágenes generadas artificialmente a su mente.

   El deporte es salud, es llevar a tu cuerpo al límite, dentro de un ambiente que regula y protege a quien lo practica es lo ideal. Es clara la necesidad de organizar los deportes alternativos incluyendo a la peteca. Razón de más para que quienes les guste, jugar se encaminen a la integración y quien sabe, quizás algún día se juegue y se difunda más por todo el mundo.

      

   

       

      
   

Teoría y práctica. La peteca en pareja.

Teoría y práctica. La peteca en pareja.

Jugar peteca no solo es divertido y sano. No solamente es un deporte, un juego, o una distracción. Para ciertas personas es un modo de vida, un camino a seguir. Es el caso de mi chica y yo, junto a algunas parejas más que hemos conocido a lo largo de nuestro camino. Cuando jugamos juntos ella y yo el tiempo desaparece, simplemente se nos va de las manos, se evapora tan velozmente que casi es mejor que digamos que se ha sublimado. 

   Jugamos horas sin parar, y eso se nota, pues simplemente formamos un equipo espectacular, literalmente. Hemos mejorado tanto, por el gusto y la práctica, que naturalmente el rendimiento y la estética han avanzado a pasos agigantados. Solemos intentar trucos nuevos cada vez, y cada éxito se ve recompensado con un beso, con una caricia, con una sonrisa. El amor impulsa un juego intenso, técnico y estético. Y se entiende, se reconoce, se comprende que nadie puede ser tu mejor compañero de juegos que tu amor. Claro, siempre que haya amor, entendimiento, intereses mutuos, etc. En la actualidad, con tanta superficialidad, las parejas suelen ser fracciones, es decir, en una fracción son amantes y se reconocen como amor mutuo, pero solo eso, los amigos son quienes hacen las demás funciones. Así tienen fuera de la pareja al mejor amigo, al confidente, a la persona de confianza, y siguiendo de esta manera.

   Y sin pensar que la manera de los demás es errónea o mala, nosotros preferimos simplemente tener todo en uno, compartir la mente, las aficiones y los secretos. Somos socios, somos compañeros de juego, de guitarra, somos confidentes. Pero lo que más nos gusta es entendernos en el juego, con la maravillosa peteca. Hemos desarrollado cierta intuición mutua para anticiparnos a lo que piensa el otro. Al jugar peteca juntos crecemos como pareja, pues es notorio que estamos unidos a quien nos observe jugando, nos movemos sincronizados, a la misma velocidad, podemos lograr los mismo retos, y por supuesto jugar a la velocidad del sonido.

   Nos gusta jugar a los malabares con dos petecas a la vez, jugar al reto con una peteca superpequeña para medir nuestros reflejos y nuestra habilidad. Pero nuestra especialidad es jugar depredador, tecuani en lengua nahuatl. Es la versión en la cuál la peteca se usa como proyectil a toda velocidad, y el rival tiene que controlarla sin detenerla, es decir a base de dominadas y de la misma manera arrojarla a toda velocidad al contrincante, para que intente de la misma forma controlarla para enviarla a su vez.

   Es hermoso jugar a velocidades vertiginosas, y cuando practicas cotidianamente se pueden hilar muchas jugadas cuando se posee técnica y reflejos, aunque jugar con tu pareja te da un extra en entendimiento, un extra en capacidad técnica e intuitiva del juego, pues logras adivinar de antemano los movimientos y así anticiparte. Siempre que nos ven, otras parejas se contagian, nos preguntan, se internan en nuestro mundo, pues desean también ese tipo de conexión en sus vidas.

   Así se puede apreciar dominio del juego, amor al juego y amor de pareja. Y muchos más nos lo dicen, nos comentan, piden entrar en el mundo de la peteca y llevar a sus parejas dentro. Tenemos clientes que buscan las innovaciones en la peteca para seguir disfrutando en pareja. Nada mejor que hacer deporte con un juego divertido, para tener bonitos cuerpos y mejorar como pareja, siempre nos lo comentan y nosotros compartimos su opinión.

   El deporte, la vida, el universo, se aprecian mejor cuando tienes con quien compartirlo, la familia, los amigos, tu amor, la vida se hace a través de la sociedad que conformamos todos los seres vivos. La peteca es un instrumento para romper barreras entre individuos, para crear lazos afectivos y darnos a cambio una sociedad más poderosa y compartida. Así tendremos una humanidad unida, con valores, tales como la competencia limpia, la capacidad de asociación y el sentido de pertenencia, todos éstos provenientes del deporte. Ojalá les haya gustado, esperamos sus comentarios, saludos y felices juegos.

Aprendiendo el juego 1 "el saque y la devolución".

Aprendiendo el juego 1  "el saque y la devolución".

Todo arte, deporte o disciplina requiere un aprendizaje, pues para expresar algo a través del cuerpo o de la mente se necesita una preparación, amen de capacidades, una mente sensibilizada y disposiciones especiales. En los deportes se requieren habilidades físicas, además de conocimientos, todo esto sin olvidar la necesidad de conocer las reglas de la disciplina deportiva. La peteca no es la excepción y para poder jugarse se deben de aprender habilidades, regla además de desarrollar los reflejos.

   Suele suceder que las personas que lo ven por primera vez piensan que es la cosa más fácil del universo, y pronto encuentran el desengaño. A pesar de que algunos deportistas suelen desdeñar a nuestra amada peteca, los que suelen pensar que es demasiado fácil y sin retos son aquellas personas que nunca han realizado deportes o alguna actividad física. Este vídeo nos enseña su engañosa facilidad.

   El primer paso es el saque, existen dos modos, ambos correctos y usados dependiendo la estrategia. El primero es lanzando la bola al aire a una buena altura, el paso siguiente es conectar a la mayor altura que pueda el jugador, sea en el suelo o saltando y encontrarla en el aire al vuelo. Este tipo de saque es excelente para intentar un saque as y darle al juego el ritmo vertiginoso que les gusta a los grandes exponentes. Sus desventajas son la perdida de precisión además de un incremento en el promedio de perdida del saque por estrellarla en la red o echarla fuera de la cancha. En este vídeo podemos observarlo claramente.

   El segundo saque es sosteniéndola con una mano y pegandole al justo instante en que se suelta para que la segunda mano no estorbe. Este saque no es tan veloz, pero es muy controlado, es decir,  de precisión y evita la comisión de errores no provocados. Es el más común y recomendado incluso para jugadores con experiencia, pues permite evitar el error, aunque el rival tiene más oportunidades de contestar. En este segundo vídeo podemos ver el ejemplo del segundo saque, así mismo algunas devoluciones, de las que hablaremos más adelante.

   Para contestarla tenemos dos maneras igualmente. La primera es usando la mano de abajo hacia arriba describiendo un arco que encuentre en su trayectoria la peteca. Este tiro es recomendado para cuando el saque viene abajo o su trayectoria es lejana a la posición del jugador. Permite elevar un tiro bajo y lograr pasar la red además de que su arco es corto pero alto, haciendo moverse al rival. Su desventaja es la falta de potencia y velocidad, por tanto no tiene mucho "spin" o efecto.

   El segundo tipo de contacto es el elevado. Permite contestar tiros elevados, ideal para quienes tienen un buen salto y excelente coordinación. Ideal para contestar tiros pegados a la red o darle efecto y velocidad a los toques, complica al rival la contestación, pero requiere mucha destreza. Es el que suelen usar más los novatos por instinto, pero con resultados malos al principio, pues suelen tirarla a sus propios pies. La manera correcta es describir un arco amplio por encima del cuerpo para encontrar la peteca en el punto más alto y apuntando el tiro hacia arriba. En el siguiente vídeo podemos ver ambos tipos de contestación durante un entrenamiento y apreciar sus diferencias, así como sus aplicaciones.

No dejen de practicar nunca y por favor coméntenos sus inquietudes.

Estilo foot-tennis

Estilo Foot-tennis.

Dentro de las variaciones de la peteca, está el estilo foot-tennis, que se coloca como una de las maneras más equilibradas de entrenar el cuerpo, mejorar la coordinación motriz y entrenar la técnica individual del fútbol de manera lúdica. Para aquellos que ya gozan de una buena coordinación, y tienen práctica jugando las variaciones más tradicionales es una buena opción. Usualmente a los novatos se les dificulta pegarle con el pie, hasta suelen dañar la bola por la falta de cálculo. Nada que algunas horas de práctica no puedan solucionar con suma facilidad, además podríamos agregar la necesidad de una fecunda paciencia.

   La mecánica es como la variación brasileña de la cual hemos hablado en este espacio. Se juega a quien gane 2 de 3 sets, el saque se alterna de pie, se consigue en sorteo al inicio y después lo gana quien gane el punto. Varia en relación a la versión con la mano en la altura de la red que no puede superar el metro y medio. El punto se gana golpeando la cancha del rival, o provocando el error, los toques son ilimitados antes de pasar la red. 

La diversión generada por esta variedad es infinita, el desarrollo deportivo es inmenso, es recomendado como modo de entrenamiento, ayuda a mantener en forma el cuerpo entero. Ejercita los músculos de extremidades superiores e inferiores, desarrolla habilidades motrices en todo el cuerpo, además de permitir a la mente una sana recreación. 

   Cabe señalar que existe competición oficial en esta variación, incluso es a nivel mundial, a pesar de que en México no sea popular. Lo único que queda señalar es que en la versión con los pies se requiere jugar siempre con esa parte o es falta y cuenta como punto al rival.

   Es necesario aclarar que curiosamente esta variación viene de China, aunque se pensaría que es brasileña por la relación con el fútbol. Y es en Asia donde más aparece, pero creemos que el deporte es universal y no tiene nacionalidad. Así que invitamos a nuestros lectores a degustar de esta maravillosa variación. Nunca dejen de practicar un deporte por su salud y su sana diversión.

   No dejen de comentarnos, ustedes hacen de éste un lugar mejor en la web, los esperamos en nuestra siguiente entrega.

Mi vida antes y después de la peteca.

Mi vida antes y después de la peteca.

Siempre me han gustado los deportes, desde que tengo uso de razón me ha gustado correr y poco a poco viví una relación de amor y odio con los juegos de pelota. Solo había un pequeño detalle. Cuando tenía siete meses de nacido sufrí un grave traumatismo en un accidente automovilístico junto a toda mi familia. Me fracturé el fémur derecho y quedé con una levísima parálisis muscular, lo suficiente para convertir en todos mis movimientos en el paroxismo de la torpeza, y sumando el hecho de que soy miope, bueno yo era todo un monumento a la torpeza. 

   La única actividad deportiva que me gustaba era correr. Corría a todos lados, a la escuela, a la panadería, a la tienda, a la vida. Y solo porque corriendo me tropezaba muy poco, no requería mucha habilidad, me caía a veces, pero la rabia me hacía levantarme en un instante y salir corriendo con más velocidad.

   Era un sufrimiento cuando mis atléticos padres me animaban a hacer un deporte de reflejos, los balones se estrellaban alegremente contra mis cuatro ojos. Me tropezaba al buscar el balón. Le pegaba de la manera más ridícula a las pelotas. Sin embargo el amor de mis padres, la paciencia de mi hermano, y el apoyo de mis primos me ayudaron a mejorar gradualmente hasta gustar más día a día de mi tortura deportiva.

   Gracias al apoyo familiar, mi terquedad, y mi desdén por el dolor logré aprender a hacer saltos mortales, jugar competentemente al fútbol y al basquetbol. Pero siempre con mi huella personal, los movimientos robóticos, forzados y cuando me equivocaba era de la manera más ridícula y penosa que podía existir.

   Hasta que un día conocí la peteca... y mi vida cambió para siempre. Al verla volar la primera vez tuve un buen presentimiento de que ese extraño artefacto emplumado y yo nos íbamos a llevar de maravilla. Cuando le pegué en la dirección en que debía mi alma gritó de felicidad. Mientras aprendí los fundamentos a lo largo de una veloz hora, noté que nunca más me iba a separar de ella. Al ver que inmediatamente me destaqué por mi rendimiento me cayó del cielo el conocimiento de que la peteca y yo íbamos a vivir felices para siempre.

   El primer día jugué seis horas casi consecutivas, hasta que la pobre peteca quedó desecha. Adolorido pero feliz, consciente de que algo había operado en mi. Al llegar a casa me metí a la red de la información a buscar todo lo relativo a mi nueva pasión y no pude dormir nada por entretenerme conociendo el mundo de la peteca.

   Hice mis primeras petecas de papel, y comencé a jugar horas y horas yo solo, pues nadie más me acompañaba en mi nueva pasión. Pasé meses enteros buscando la manera de fabricarlas y poder jugar sin usar las petecas desechables que hacían en mi ciudad. Hasta que un día hablando con mi pareja ambos descubrimos que compartíamos ese gusto y decidimos no parar hasta fabricarlas e inundar el mundo de ellas, para que tuviésemos miles a acompañantes en este nuevo mundo. Que miles de personas cayeran bajo el hechizo hipnotizante de sus colores en el aire y su delicioso sonido al ser golpeada.

   Un día como cualquiera conseguimos el material para fabricarlas, y llegando a casa me puse manos a la obra. Tardé toda la noche en hacerla, logré terminar justo a la hora que debía haberme levantado para irme a trabajar. Al salir del trabajo, tomé la primera peteca verdadera que fabricaba por mi solo y se la llevé a mi chica para que jugaramos. Y comenzamos a jugar y jugar, a fabricar y fabricar.

   Una cosa llevo a la otra y de repente nos encontramos siendo los autores de varios cientos de petecas,  también los promotores más fieles del juego en México y sin duda unos de los practicantes más asiduos. Y no solo eso, al volver a practicar otros deportes nos encontramos más aptos que nunca, hemos notado mejorías indiscutibles.

   Para el hombre más torpe del mundo fue volver a nacer siendo otro, de repente era un buen ejemplo en el deporte, inusualmente era él quien enseñaba a los demás cómo se juega un deporte. En su piel experimentó y vivió el refrán que reza: "del odio nace el amor". Y el amor es el sentimiento más poderoso del universo, dotando de vida a todo lo que nos rodea, hasta a un objeto extraño con plumas, hasta esa hermosa terapia voladora.

   Por favor comenten, ustedes hacen este espacio, gracias por leernos.